LOST PARADISE

EVA & ADAN
Ubi Sunt
L. Soriano.-
Pues sí, se aburrían en el Paraíso, y al parecer fue Adán y no Eva, hasta Paul Anka lo cantaba, pero ya se sabe, el machismo congénito en todos los libros religiosos es algo que me hace dudar de su veracidad. Claro que en su descarga, la “Nueva religión”, sólo se vengaba hace unos 6000 años de la ignorancia de haber creído desde siempre, desde Horus a Trismegisto, Desde Isis y Osiris,  casi incluso hasta  Abraham, que la mujer paría vida nueva sin intervención directa del hombre. Mejor dicho, que la intervención era deseada pero no imprescindible. Menudo engaño los matriarcados durante miles de años. Tenían su función protectora y la cumplían.
No conocían la Teoría de la utilidad marginal del consumo. Que es decreciente. Una manzana bueno bien, 10 manzanas, hacen descender el interés por la manzana. Mucha dosis de Paraíso, mucho Dios o lo que fuese, mucho patatín, pero un aburrí de ostrón del Caribe.
Y ahí estaba lo prohibido, lo desconocido, lo suicida, lo provocador, lo peligroso, lo arriesgado, lo insólito, lo contestatario, lo retador, lo desalienante. El árbol del fruto del bien y del mal. Era un arbolito cualquiera, un manzano, parece, pero tenía un Imán especial. Era prohibido, y que la Autoritas  sancionaba siquiera acercarse a él. Lo de la serpiente es una alegoría judeo cristiana.
El ser humano sí, es extraordinario, pero también imprevisible, incontrolable, emocional, cerebral e intuitivo.  Eva estaba hasta el mismo gorro del siempre  igual y para siempre. Les faltaba la emoción de lo prohibido. Bien que  lo pagó y bien que nos fastidió el asunto. A partir de que San Miguel los corriera del Edén a espadazos ardientes, tuvieron que trabajar, sufrir, padecer y morir, y nosotros, sus descendientes, con ellos.
“Ubi sunt”, se preguntaba Milton en su Paraíso perdido, en referencia a la fugacidad de las glorias mundanas, de los elementos del mundo terrenal y sensorial. Recuerdo aquel Magnate que teniéndolo todo todo, decidió arriesgarlo todo y  perderlo, todo, y dedicarse a la delincuencia más perversa. Cuando acabó en la cárcel, le preguntaban, ¿Por qué? Porque podía- contestaba-. Estos días uno de ellos decía que va a ser apasionante ver, lo que salga de una crisis de estas dimensiones.
Lo teníamos todo, y lo perdimos todo, nos hartamos de tanto paraíso, tanta seguridad, tanta prosperidad y tanta gaita. Vivir al límite nos llena de adrenalina cada mañana. Y sí, será apasionante ver que viene después del diluvio.
A reflexionar.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Parerga y otras historias secundarias o accesorias y algunas vidas extraordinarias

Presentación del libro: 'Parerga y otras historias secundarias o accesorias y algunas vidas extraordinarias' Autor: Lorenzo M. Soriano Rodríguez Presenta: D. Octavio Calderín, Miembro Junta Directiva - Conservador de la RSEAPT
Separador