CIRCO y poco pan
L. Soriano
La frase atribuida a un Emperador romano, de
que al pueblo para dormirlo y que no vea los reales problemas que le afectan y
piense en quienes son los responsables, hay que darles pan y diversión. Nuestro
Primer Ministro y su bizarro gobierno, sin embargo, al igual que el anterior, se
atreven con el “más difícil todavía” y dan circo, mucho circo, pero sin pan. Y
están seguros de que no va a pasar nada. Y que siempre encontraran un Prestige
o un Irak, o una herencia recibida, un rescate o una Prima, en quien descargar.
Pues sí, nos dan circo a manta, pero con tan
poco pan poco durará la alegría y la
distracción deseada.
Sobran los payasos, faltan los portores, hay
decenas de equilibristas, de funambulistas y hasta un buen puñado de
trapecistas. Hay Tigres y caimanes, cocodrilos, osos, leones y muchas serpientes,
sobre todo, pitones. Serpientes
encantadoras, de perfil bajo y sin glamour
La falta de respeto por la ciudadanía aterrada
y subvencionada es superlativa. Pero están forjando su sueño colectivista con
la Nomenklatura, el Presidium, el Gran Timonel y los planes quinquenales y los
de desarrollo como los de Rodó. Que todo
dependa de la magnanimidad del gobernante. La mayoría de las acciones que
emprenden no son efectivas porque cuando se aprueban ya es tarde, y los
afectados ya no respiran. Cada uno lo malo de los otros. Ellos aumentan las
fiestas, se dan condecoraciones, premios y prebendas, puentes, mucho fútbol, el
circo máximo. Y así hasta las elecciones.
“ qué bonito es un
entierro
con su caballito blanco
y con su caballito negro
con su cajita de Pino
y su muertecito dentro”
La oposición esta como en la “mili”, tratando
de pasar desapercibida, que no la vea el sargento. Todo lo que ocurre es “a
pesar de ella”, nada gracias a ella. Esperan el momento de pasar a la acción,
pero sin mucho entusiasmo. Quien va a montar esos tigres es la pregunta. El
país que se encontraran si ganaran seria
un solar. Los Titiriteros ya no atacarían
con tanta intensidad como lo es su actual silencio. Los sindicatos adormecidos
y acorralados no gritan que “ya está
bien” ni salen a la calle a “luchar” por los trabajadores, ahora no, gato no
come gato ni a perro ni a amo. Los medios, todos con escasísimas excepciones,
si es que quedara alguna en un par de años, clamarían por la vuelta del
“ocurrente” y su troupe de buhoneros y saltimbanquis. Los terroristas aseguran que el del talante era más bizcochable y que
Rubalcaba es un tío grande, pelillos a la mar con lo de GAL.
Los
nacionalistas tan de derechas ellos no quieren otro compañero de viaje porque
ningún otro les permitiría los desmanes. Más dura será la caída pero sobre todo
más honda, la de aquellos que nunca debieron subir.
Carnaza, aborto, memoria histórica, género,
discriminación positiva, igualdad. Los euros, las propinas, las bombillas, las
lavadoras noctámbulas, la corbata. Ah y Montoro que no se nos olvide. Y lo
dicen y lo hacen en serio, es todo lo que se les puede ocurrir, no dan más, no
hay más. Cuando no tengas una idea, inventa una frase le decía Mephisto a
Fausto.
A reflexionar
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