Las Cartas sobre la mesa. Y SI SI
L Soriano
Dejemonos de teatrillos, y vayamos a lo magro.
Aquí el enemigo del PP no es Vox, y no se quieren enterar
los de la cúpula Pepera. Aquí para echar a Sanchez, hay que arrimar hombros,
dentro de las diferencias distintas y distantes, peculiaridades, vicios y
virtudes de ambos dos juntos y a la vez. Por lo menos no se aticen, no se hieran, no se
ofendan. Copien a Ayuso, no los machaca ni los demoniza.
En España no existe la extrema derecha que pueda aspirar
al poder. De hecho no existe más que en grupúsculos minúsculos y anticuados. Tambien
tienen derecho. Ante tanto ultraizquierdista, comunistas y partidarios de
asesinos y criminales, que de esos estamos llenos, que haya algo en el otro
lado es lo normal.
La “first blood”, la primera sangre entre PP y Vox, la provoca Casado, A traición
y con alevosía, suelta a Abascal en pleno parlamento, lo de “Traicionar la
sangre de sus compañeros”. Ese Casado ,
Claudio* más bien, fué el que quiso cargarse a Ayuso pactando con el PSOE su destrucción,
y de la entrega de Margarita Mariscal en bandeja y demás felonías como Murcia
etc. Y sigue ahí, agachado, protegido por el partido, y como farol de advertencia
a Ayuso y a Cayetana.
Ese PP que se ha deshecho de tanto valor político, como
Vidal Q, Cascos, Rato, Trillo, Oreja, Zaplana , Camps o La difinta Rita, y un
largo etc. y lo ha cambiado por tanto inútil y papanatas, temerosos, tibios al
peor estilo Rajoy. Al que por cierto exhiben también como desagradable trofeo, recordándonos su paso por
la Presidencia y llenándonos de congoja y depresión.
Hay que buscar soluciones, o crearlas si no las
encontramos dado que al parecer, Sanchez hace lo que quiere y conviene “porque
puede”. Hagamos que mientras nos deje y podamos no pueda. Vayamos a las
elecciones pensando en que juntos les ganamos, y vigilando las urnas como la
virtud mas allegada. No nos agredamos.
Podemos señalar diferencias si se quiere, pero no
descalifiquemos con quien tenemos irremediablemente que pactar para echar al “Parasito
Monclovita”. Busquemos soluciones. Hasta las que parezcan descabelladas. Y aquí les lanzo una.
Habra alguien, que sea capaz de convencer a …por ejemplo
Puigdemont, de que exhiba un discurso acerca de que, a pesar de ser separatista
convencido, como es su derecho, el no le desea ningún mal a España. Que incluso
si por interés fuese, preferiría que España no fuese una bananera caribeña, y
que deja de apoyar a Sanchez, para evitar situaciones irreparables o difíciles de
revertir, que afectaran a todos , incluso a una Cataluña dentro o fuera de
España. Que bien quedaría, como subiría su
valor personal y de político. Que prestigio ganaría y que lección nos daría. Como
cambiaria nuestra percepción del Independentismo catalán.
Algo así habrá que intentar, o es que no hay ni uno de
los justos o justas que no vean la ciénaga de este PSOE, y a lo que abocan a
quienes le apoyan en indignidad y falta de ética. No hay Hombres o Mujeres de
Estado en todo el o en , los parlamentos, que puedan o quieran pasar a la
historia, sin renunciar a sus principios, pero sin demoler la Nación de donde procedían.
Es solo una propuesta. Soñar aun es
gratis.
A
reflexionar
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