Censura y censores.- L Soriano
Sí, incluso
y más, las privadas, que deberían ser las más abiertas. Sorprendentemente es
así. Sociedades mercantiles, deportivas, cívicas y demás, andan secuestradas
por el poder, en este caso socialista fundamentalista, de clan y manada, de
tribu y camada. Eso sí, bien sulfatadas con el dinero de los españoles, y
abrevadas en los dornajos del poder. Bebederos de pollos y pollinos que debemos
rellenar cada día, para que sea entregado a lo peor de cada casa. Y es lo peor,
porque si tuvieran dignidad y respeto, o fueran gente honrada y cabal, no
admitirían los disparates que proponen los experimentadores sociales, ni las
ocurrencias de los iletrados allegados al olor del dinero que emite el fétido
poder.
Sabemos,
damos por hecho, aunque lo denunciamos y lo reprobamos, que la Universidad es
el patio de la izquierda más rabiosa, la de la falsa hegemonía moral y la de la
tergiversación de la historia. La damos por perdida ya que en sus entrañas -y
encaramadas a sus rectorías y gerencias- está lo más nauseabundo de la sociedad
civil, la más reaccionaria, la más totalitaria y la de peor calaña. Hemos
dejado que ocurra y siguiendo a Gramsci, lo han vuelto a hacer.
La Sociedad
Civil, es la sociedad que trabaja, no vive del cuento, es más culta y educada,
más esforzada, con mejores y más largos objetivos, valores, modos, y no se
moviliza fácilmente, ya que le cuesta mucho dejar sus trabajos para coger la
pancarta o el adoquín.
Sin embargo
el cruzar la línea de amedrentar de tal manera a medios e instituciones, con el
mensaje de que ni se les ocurra dar aliento alguno a opositores, contrarios,
adversarios o enemigos, aunque no sean políticos sino pertenecientes a la
Sociedad Civil, con valores distintos y distantes de los que gobiernan, hasta
ese punto Jamás se había llegado. Desde la república, que cerró cientos de
cabeceras de periódicos y radios, centros privados, colegios iglesias e
Instituciones de cualquier otro signo, formó checas a decenas, torturó y
asesinó a religiosos y seglares, dando comienzo así a la revolución que algo
más tarde, llevaría a la Guerra Civil. Pareciérase que quieren declararla de
nuevo, y esta vez intentar ganarla. Los resultados de Andalucía, los han
asustado, como los de Madrid. Y yo les digo, no permitirán que gane la derecha
en buena Lid, por lo cual tendremos que dejar de ser ingenuos y caballeros,
peleando por la limpieza de las urnas. No destruir los votos, comprobar todos y
cada uno, los foráneos, por correo, desechar duplicidades y cajones preparados.
La derecha
debe unirse, como dispares y enemigos aún, ellos de la izquierda se unen.
Habrá que
usar estrategia, dejar egos en el cajón con llave y como dice Savater, fijarnos
un objetivo, una meta, un fin, “Echar a
Sánchez y a la hez”. Levantemos la censura que ni Franco se atrevió. He
presenciado e incluso asistido a manifestaciones, publicaciones, eventos y
proclamas desde los años 60 al menos, sin la censura que ahora padecemos, las
más veces autoinflingida, por miedo a perder algunas de las migajas que se caen
de las enormes mesas de los banquetes de la izquierda Irredenta y asoladora,
pero corrupta y destructiva.
A
reflexionar
Reflexiones
L. Soriano