LA EXISTENCIA DE LA IZQUIERDA.-
L Soriano
Es curioso que la pura existencia de la izquierda, se deba a
la estupidez de la derecha. La izquierda, y esto es una verdad universal, no
produce nada. Solo consume, gasta, derrocha, destruye economía, fomenta
subvenciones, dadivas, pagas, y desvíos de dinero, pero en “cerros de chocolate
y junglas de loros”. Nada de lo que la izquierda hace o propone, las sociedades
públicas que crea, todo es puro fiasco, perdidas, insolvencia, pobreza,
miseria. Eso sí, los dirigentes, los mediáticos que la apoyan, los que predican
el mensaje, por pura casualidad, que siempre es su aliada, siempre son
millonarios. Hay que ver lo curioso, entre más radicales de izquierdas, más
ricos son, más propiedades tienen, sueldos más altos gozan, los altos cargos,
los artistas de izquierdas, casi todos, los presentadores públicos o privados,
de programas donde se defiende a la izquierda, casi todos , tienen enormes fortunas.
Que detraen del que dicen defender.
La inmensa mayoría de los dirigentes de izquierdas, jamás
han trabajado en nada. En algo productivo muy pocos. Los más funcionarios,
profesores o enchufados a las ubres del poder. Pero todos, todos, viven de lo
que la derecha, de lo que el votante de derechas produce. La izquierda pide que
las empresas no tengan beneficios, pero saben perfectamente que de los
beneficios de las empresas se extraen la mayoría de los impuestos que después afanosa
e indelicadamente se reparten con fruición.
Está claro, la izquierda no subsiste sin los impuestos que
producen las derechas. Sin las empresas que crean los empresarios, mayormente
de derechas o votantes de la derecha aunque sea por intentos de pura
supervivencia. La izquierda fomenta el cierre de empresas, la huida o no
llegada de inversiones millonarias por miedo a la inseguridad fiscal, por la
hemorragia o diarrea fiscal de la izquierda. Usan nuestro dinero y lo distribuyen
muy mal para los ciudadanos, ofreciéndoselos a sus votantes, militante o
apoyadores.
Es impresionante el
temor a lo “inexistente” como a la extrema
derecha, el fascismo, del que no hay rastro, o sacar a pasear a Franco y sus
generales, todos desaparecidos hace más de 50 años, cuando se fomenta gobernar
con terroristas, comunistas y radicales de toda especie. Con 300 asesinatos sin
resolver, con gente que dan golpes de Estado y dicen que lo volverán a hacer.
Eso no les impide gozar de inmunidad, impunidad y de pasear su “Falsa hegemonía
moral”. Son arañas succionadoras de presupuesto al que la derecha consiente que
se acerquen por mera desidia o comodidad.
Está claro, sin la derecha, la izquierda, toda ella, desaparecería,
diluyéndose en un totalitarismo cubano en pocos años. De ahí a querer
destruirla, pensando que lo que produzca la izquierda gobernando y sin la
derecha, o esclavizando a esta “sine die”, se podrá repartir mejor entre todos
y sin esfuerzo. Todas utopías derivadas en decenas de ejemplos que se niegan a
reconocer, alegando que ellos lo harán mejor. Cuando esto ocurre, ya es muy tarde,
los gerifaltes se quedan ,encarcelan y hasta cosas mucho peores, y ya no hay salida. Hay que poner remedio a esto sin falta, con prisa y sin pausa.
A reflexionar
2 comentarios:
Ya 46 años
Estupendo artículo. Gracias.
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